La enfermedad de las encías es una afección bastante frecuente en la población y que en función de su estadio, puede ser más o menos grave. Descubre con nosotros sus causas, síntomas y tratamiento.
La enfermedad de las encías es una patología infecciosa de las encías que presenta diversas etapas en función de su gravedad.
Esta enfermedad es causada por las bacterias que se general al acumularse la placa en nuestros dientes.
Una higiene dental deficitaria suele ser la principal causa de la enfermedad de las encías, aunque no es la única.
Si no se detecta y trata a tiempo, las bacterias pueden llegar a infectar no sólo la encía superficial y los dientes, sino también el tejido gingival y hasta el hueso que sostiene las piezas dentales.
Además, un reciente estudio ha encontrado una relación directa entre esta enfermedad y los síntomas y complicaciones derivadas de la COVID-19.
En concreto, dicho estudio reflejó que los pacientes que habían sido infectados por el coronavirus y sufrían de enfermedad de las encías, tenían 3,5 veces más probabilidades de ser atendidos en la UCI, 4,5 veces más probabilidades de necesitar un ventilador y casi nueve veces más probabilidades de morir.
Una razón más que convincente para tomarse muy en serio la enfermedad de las encías.
Etapas de la enfermedad de las encías
Esta enfermedad puede pasar hasta por 4 etapas o estadios en función de su gravedad y presentando diferentes síntomas
Gingivitis
Es la primera etapa de la enfermedad, en la cual se produce una es una inflamación de las encías provocada por la acumulación de placa en el borde de estas.
Debido a esta acumulación, las bacterias irritan el tejido gingival, causando gingivitis.
Los síntomas más habituales de la gingivitis son, el sangrado y enrojecimiento de las encías y la inflamación de la mucosa bucal.
GUNA
La gingivitis ulcerosa necrosante aguda (GUNA) es, en realidad, un tipo de gingivitis que aparece como consecuencia del sobrecrecimiento de un tipo de bacterias presentes de forma natural en la boca, llamadas espiroquetas.
Los síntomas de la GUNA son el mal aliento y el picor de encías, que se añaden a los síntomas habituales de la gingivitis.
Periodontitis
En esta etapa, se forma una bolsa bajo el borde de las encías, donde quedan atrapados los alimentos y la placa dental, lo que puede llegar a dañar el hueso y las fibras que sostienen los dientes.
Son síntomas recurrentes de la periodontitis la retracción de las encías o que los dientes empiecen a moverse ligeramente, además del sangrado.
Periodontitis avanzada
Se trata de la última y más grave etapa de la enfermedad, e la cual se produce la destrucción de las las fibras y del hueso que sostiene los dientes.
En esta fase, los dientes se desplazan y aflojan claramente, pudiendo llegar a verse afectada la mordida y finaliza muchas veces con la necesaria extracción de los dientes.
Causas de la enfermedad de las encías
Como indicábamos anteriormente, la principal causa de la enfermedad de las encías es por la acumulación de placa, una capa gruesa de bacterias, que se forma en los dientes y en torno a las encías, pero no es la única. Estas son otras causas posibles:
Fumar: Si fumas, tienes más riesgo de desarrollar la enfermedad de las encías y, si la padeces, más probabilidad de que sea más grave y más complicada de tratar
Cambios hormonales femeninos: Durante el embarazo o durante los ciclos menstruales, los cambios hormonales provocan que las encías sean más susceptibles a la enfermedad de las encías
Dieta inadecuada: Una dieta, por ejemplo, con alto contenido de azúcar e hidratos de carbono y contenido bajo de agua y vitamina C puede provocar problemas en las encías. La vitamina C es clave para mantener unas encías saludables
Consumo de ciertos medicamentos: Algunos medicamentos pueden tener entre efectos secundarios el provocar sequedad de la boca, lo que favorece la propagación de las bacterias
Dientes desalineados: Si tenemos los dientes desalineados, se genera más espacio entre ellos, donde la placa puede acumularse y favorecer la enfermedad de las encías
Factores hereditarios: Si hay antecedentes de enfermedad de las encías en tu familia, podrías tener un mayor riesgo de contraerla
Prevención y tratamiento de la enfermedad de las encías
La mejor forma de prevenir la enfermedad de las encías es llevar una adecuada rutina de higiene bucodental cada día.
El buen cepillado de los dientes, encías y la lengua es clave, pero no debemos descuidar los espacios interdentales (entre diente y diente) ya que suponen el 40% de la boca.
Para eliminar los restos de alimentos y placa bacteriana de estas zonas, lo ideal es utilizar el hilo dental y los cepillos interproximales.
Tampoco de olvides de visitar a tu dentista cada 6 meses. Igualmente y de realizarte una profilaxis o limpieza dental profesional al menos una vez al año.
En el caso de pacientes que tengan o hayan tenido una enfermedad periodontal, la periodicidad de esta profilaxis se puede reducir a cada 4 o 6 meses.
En cuanto al tratamiento, durante las primeras etapas de la enfermedad, recuperar una buena higiene bucodental ayudará a que se agraven los síntomas. También en esta fase, tu dentista podría recomendarte el uso de alguna pasta de dientes o colutorio específico.
En fases más avanzadas y cuando los depósitos bacterianos se acumulen en la superficie de la raíz de diente debajo de la encía, bajo anestesia local se eliminarán mediante unos instrumentos diseñados especialmente para ello llamados curetas. Este tratamiento es conocido como curetaje o raspado y alisado radicular.
Esperamos que este post os haya sido de utilidad, en todo caso, si pensáis que podéis estar sufriendo esta enfermedad o tenéis alguna duda, no dudéis en contactar con nosotros, desde vuestra clínica dental en León os atenderemos encantados.