Casi todos los bebés, durante mas o menos tiempo, utilizan el chupete regularmente y son muchos los padres que se preguntan si esto podría ser perjudicial para ellos en algunos aspectos.
Hoy nos centramos en los efectos del uso del chupete en la salud bucodental de los más pequeños, resolviendo algunos mitos y dando respuestas a algunas de las preguntas más frecuentes que surgen al respecto.
¿Puede afectar el uso del chupete al desarrollo de los dientes de los bebés?
Pues si tenemos que responder de forma tajante a esta pregunta, lo cierto es que sí que puede hacerlo, aunque sólo en determinadas circunstancias y cuando se produce un "abuso" en este uso, ya sea durante muchas horas a lo largo del día o prolongado a lo largo del tiempo.
Algunos estudios han determinado que el uso prolongado del chupete puede provocar que los dientes centrales inferiores se vayan desviando gradualmente hacia adentro, debido al efecto de la succión.
También puede ocurrir, por la misma causa, que las piezas dentales del maxilar superior se separen y se descoloquen hacia afuera, en este caso.
Como consecuencia de esta malformación en la ubicación de las piezas dentales se puede generar la maloclusión y mordida abierta.
Esto provoca que las filas de dientes superiores e inferiores no cierren correctamente y puede llegar incluso a deformar el paladar y la mandíbula.
Finalmente el movimiento de succión que se realiza al chupar el chupete, cuando se prolonga mucho en el tiempo, puede ocasionar la mordida cruzada, perdiendo la boca su paralelismo.
Algunas preguntas y respuestas frecuentes relacionadas con el uso del chupete y la salud bucodental
Visto el punto anterior lo que no vamos es a cometer el error de decir que el chupete no es bueno para los bebés.
De hecho, el uso del chupete se recomienda durante los primeros meses de vida, ya que lejos de perjudicar, ayuda al correcto desarrollo del paladar.
Además, también calma al bebé, le ayuda a conciliar el sueño y que este sea más profundo y funciona como analgésico frente a los dolores que provocan la salida de los dientes de leche.
Lo que es importante es tener en cuenta algunos consejos para evitar que su uso perjudique a su salud bucodental y por supuesto que vuestro dentista de confianza revise el correcto desarrollo de sus dientes.
A partir de ahí, damos repuesta a algunas preguntas que quizás os hagáis relacionadas con este tema:
¿A partir de cuando se puede usar el chupete?
La OMS advierte de las posibles interferencias que puede causar el uso del chupete en la lactancia materna, ya que puede confundir la succión del bebé y afectar a la cantidad de leche que la madre produce.
Por eso es importante que antes de que un bebé use el chupete, la madre se asegure de que la lactancia esté funcionando correctamente.
De forma orientativa, no se suele recomendar el chupete antes de las 2 semanas de vida del bebé y preferiblemente pasado el primer mes.
¿Es mejor que el bebé se chupe el dedo a que utilice chupete?
Algunos padres consideran de forma errónea que es mejor que el niño se chupe el dedo en lugar de usar un chupete, ya que lo ven como un acto más natural y menos dañino.
La realidad es que llevarse el pulgar a la boca conlleva mayores riesgos que usar el chupete para la salud del bebé.
Por un lado, hay que considerar que un chupete se puede esterilizar muy fácilmente pero no ocurre lo mismo con un dedo, ya que el niño toca todo lo que tiene a su alcance y sus dedos pueden contaminarse con bacterias, las cuales van luego a la boca.
Por otro lado, al ser la superficie del dedo más dura que el material con el que se fabrican las tetinas, el bebé puede dañarse la mucosa bucal.
¿Cuál es el mejor chupete para mi bebé?
De látex o de silicona, con tetina redonda o anatómica... a veces los padres pueden tener dudas a la hora de elegir el chupete para sus hijos.
Al final, no siempre se acierta y es el bebé el que decidirá que tipo de chupete le gusta más, pero en general si que deberíamos de tener en cuenta 3 recomendaciones básicas relacionadas con la salud bucodental de los más pequeños:
Es mejor usar chupetes con agujeros de ventilación para que el aire pase a través de estos cuando el bebé esté succionando, lo que ayuda a disminuir la presión ejercida sobre el paladar y en el desarrollo de los dientes.
Los chupetes con forma redondeada sólo están recomendados hasta que a los bebés les salen los primeros dientes.
Una vez que salen los dientes hay que apostar por los chupetes anatómicos para evitar que los dientes se desvíen de su posición. Además suelen ser más duraderos y resistentes al roce.
¿Qué es un chupete ortodóntico?
Seguramente hayas oído hablar sobre los chupetes ortodónticos pero...¿Sabes realmente que son y cual es su función?
Este tipo de chupetes tienen un diseño de la tetina, que adopta la forma del pezón de la madre mientras el bebé se alimenta.
Este tipo de chupete favorece el movimiento natural de la lengua del bebé y promueve el desarrollo adecuado de la cavidad oral.
Lo cierto es que diversos estudios confirman que los bebés que utilizan chupetes ortodónticos tienen menos probabilidades de presentar problemas de maloclusión.
Si además el bebé empieza a utilizar el chupete ortodóntico antes de cumplir los 3 meses de edad, disminuyen también las probabilidades de que el niño desarrolle el hábito de chuparse el dedo con los perjuicios que ya vimos antes que esto tiene para su salud bucodental.
Para resumir, podemos decir que el uso del chupete no está desaconsejado ni mucho menos, pensado en el correcto desarrollo de los dientes de los niños, aunque si que es importante elegir el adecuado y evitar que se prolongue este uso en el tiempo, no siendo recomendado que se prolongue más allá de los 3 años (según indica la Sociedad Española de Odontopediatría).
En todo caso y para cualquier consulta, no dudes en consultarnos, desde tu clínica dental en León estamos para ayudarte.